viernes, 15 de agosto de 2014

Diciembre 2009

No me hables de rutina cuando no haces nada por evitarla. Cuando te conformas, y cuando dejas que todo vaya pasando a tu alrededor. Olvídate de echarme la culpa cuando los dos somos culpables de haberlo dejado morir, de habernos perdido. Olvídate de que me sienta culpable. Olvídate de que te quiera ver volver. No creas que sigo por y para ti. Porque ¿sabes? Ha dejado de doler. Has dejado de estar aquí dentro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario